De acuerdo con los principios teóricos con los que coindicen muchos economistas, para un país como la Argentina una tasa de desocupación de 4% puede considerarse como lo que técnicamente se denomina pleno empleo.
El pleno empleo nunca es equivalente a desocupación cero en una economía, porque se tiene en cuenta que hay personas que pueden estar transitoriamente cambiando de trabajo, o no quieren trabajar para dedicarse a otras tareas o a estudios.
De acuerdo con el último relevamiento del Indec, que dio cuenta de un desempleo de 6,2% a nivel país, los aglomerados urbanos que ya alcanzaron el pleno empleo son La Rioja con una desocupación de 4,1%; Posadas, en Misiones, con 4%; la ciudad de Buenos Aires, con 3,9%; Ushuaia-Río Grande, en Tierra del Fuego, y Río Gallegos, en Santa Cruz, con 3,4%; Comodoro Rivadavia-Rada Tilly, en Chubut, con 3,2%; Gran San Juan, con 2,4%; Gran San Luis, con 2,3%; Formosa, con 2%; Santiago del Estero-La Banda, con 1,6%; Viedma-Carmen de Patagones, en Río Negro y Buenos Aires, con 1,1%.
Además, hay otros aglomerados con cifras próximas al pleno empleo: Gran La Plata, con una desocupación de 5,5%; Gran Mendoza y Gran Rosario, con 5,3%; Gran Catamarca y Salta, con 5%; y Corrientes, con 4,3%;
Estos aglomerados registran características económicas muy disímiles entre sí: en algunas predomina el empleo público (Formosa, Posadas y Santiago del Estero-La Banda), en otras la actividad minera (Gran San Juan y La Rioja) o la petrolera (Comodoro Rivadavia y Río Gallegos); la agroindustria (Viedma-Carmen de Patagones), el comercio (Buenos Aires) y la actividad industrial (Gran San Luis y Ushuaia-Rio Grande).
FUENTE: Línea Sindical